MACARRONES GRATINADOS

Macarrones gratinados

Este plato es un auténtico homenaje a la comida casera sin pretensiones, pero que bien elaborado y con buenos ingredientes en todo un manjar con el que disfrutar. 

Se puede optar por elaborarlo con pulpa de tomate natural pero hay que tener en cuenta que como el tomate natural tiene más agua que los concentrados de lata, la salsa tardará más en reducir.

Utilizar un buena carne de ternera recién picada también es importante para el resultado final. Como no necesitamos que esté muy picada podemos, si se tiene tiempo, picarla nosotros mismos a cuchillo.

Y para gratinar se puede utilizar un queso de Mahón ahumado o un emental o un buen parmesano, etc. Lo importante es conseguir una costra crujiente que cubra la pasta.

INGREDIENTES

200-250 gr. de macarrones.
200 gr. de carne de ternera picada.
1/2 cebolla o cebolleta.
1/2 puerro.
1 lata de tomate triturado.
1 tomate maduro rallado.
2 hojas de laurel.
Queso para gratinar.
Aceite de oliva.
Sal.
Pimienta negra.



RECETA

Poner la cebolla y el puerro finamente picados a dorar en una sartén grande con aceite de oliva caliente.

Mientras poner un olla grande con agua y sal a hervir para cocer la pasta el tiempo indicado por el fabricante.

Cuando la cebolla y el puerro empiecen a estar dorados añadir a la sartén la carne picada previamente salpimentada y sofreír 4 o 5 minutos. Poner por último la pulpa del tomate rallado, la lata de tomate triturado y las dos hojas de laurel, añadir sal y dejar que el conjunto se cocine a fuego lento durante 12 o 15 minutos hasta que el tomate haya evaporado parte del agua. Retirar las dos hojas de laurel cuando apaguemos el fuego.

Mientras, habremos escurrido y dispuesto la pasta en una fuente de horno amplia. Verter seguidamente la salsa que hemos elaborado sobre los macarrones y mezclar muy bien para que la pasta se impregne de todo el sabor de tomate y la carne.

Por último espolvorear con abundante queso rallado y poner a gratinar en el horno a 200º-250º durante 10 minutos aproximadamente hasta que la pasta adquiera un bonito color dorado y el queso se haya puesto crujiente.

Servir inmediatamente.

Se puede considerar como plato único, ya que por sus ingredientes se trata de un menú muy completo.